Menú de cachorro

Comida húmeda completa para su perro.

El menú de cachorro – libre de cereales – tiene en comparación con otros menús PETfit un mayor contenido de calcio y una consistencia más fina. Está especialmente indicado durante la transición de la leche materna a un alimento sólido.
PETfit cuida en la composición de sus recetas que todos los ingredientes sean de calidad alimentaria, frescos y además regionales.

Un 67% de carne y valiosas vísceras de ave y vacuno, en combinación con zanahoria, patata, queso fresco granulado, levadura de cerveza y aceite de colza están adaptadas a las necesidades del cachorro.

Composición:
15% carne de pollo, 14% cuellos de ave, 12% corazón y carne vacuno, 12% pulmón vacuno, 9% laringe vacuna, 3% hígado vacuno, 4% zanahorias, 4% patatas, 1% queso fresco granulado, 0,3% levadura de cerveza, 0,2% aceite de colza, minerales

Se añaden minerales para conseguir una relación equilibrada entre calcio y fósforo (1,5:1).

Sin gluten.

Componentes analíticos: proteína bruta: 11% – grasa bruta: 7,5% – ceniza bruta: 2,2% – fibra bruta: 0,4% – humedad: 78,0% – calcio: 0,45% – fósforo: 0,30%

Durante el procesamiento de la comida húmeda PETfit, es necesario añadir entre un 20 y un 28% de agua potable a los componentes crudos, algo comparable a un proceso de cocción que no es posible sin agua. Los componentes de alta calidad que utiliza PETfit no suelen contener suficiente jugo propio para ser procesados como alimento húmedo sin añadir agua. La cocción de las verduras, las patatas, el arroz, el mijo y también la carne sólo es posible con la adición de agua. Sin embargo, como el agua no es un alimento único, no debe mencionarse como ingrediente.

Consejo de alimentación:

Los cachorros necesitan entre un 2 y hasta un máximo de 4 veces más comida que los perros adultos. La cantidad de comida debería ser al menos 40g por cada kilogramos de peso corporal y puede llegar hasta 90g por cada kilogramo de peso corporal con actividad normal. Recomendamos repartir la comida en cuatro o cinco tomas diarias.

La cantidad individual de alimento debe ajustarse a cada fase de crecimiento. Los primeros meses de vida (hasta aproximadamente el cuarto mes) los cachorros necesitan aproximadamente 3 veces más alimento por kilogramo de peso corporal que un perro adulto.

Se trata sólo de valores orientativos en los que pueden influir factores como la raza, tamaño, actividad y condiciones de alojamiento.

Siempre debería estar disponible agua fresca. Una vez empezada, hay que cerrar la lata, guardarla refrigerada y gastarla en 2 días. Es recomendable ofrecer la comida siempre a temperatura ambiente.